SALES MINERALES:
Al hablar
sobre sales minerales a grandes rasgos hablamos de todas
aquellas moléculas no orgánicas (o inorgánicas) de
naturaleza iónica que se presentan en dichas sales minerales,
ya sea en estado sólido o precipitadas, así como en disolución o
bien asociadas a otras moléculas.]
Tipos de sales minerales
Son, como
casi todas las sustancias del organismo, necesarias en su justa medida para
un buen funcionamiento biológico y, por consiguiente, debe estar presente en
nuestra dieta de forma habitual y continua.
Más adelante sabremos el por qué de su importancia pero por
ahora nos limitaremos a analizar su estructura y composición,
así como diferenciar sus clases.
Sales
precipitadas:
El
factor clave que diferencia y caracteriza a las sales precipitadas de
las demás es el hecho de que no se pueden disolverse en agua, por
tanto, podemos denominarlas insolubles.
Otra
característica que no pasa desapercibida sería la de su carácter
cristalino.
Entre sus
funciones resaltamos las siguientes, dentro claro está de esta
tipología:
- Carbonato de calcio: Forma el exoesqueleto
de artrópodos y la estructura de los corales, las conchas de moluscos o
incluso las pinchas de los erizos marinos. También dota de dureza a los
huesos (formados por diferentes fosfatos de apatita [Ca5(PO4)3(F,Cl,OH)])
y los dientes de los animales vertebrados, en los cuales de la misma
manera se aprecia la presencia de fluoruro de apatita [Ca5(PO4)3(F)].
- Fosfato cálcico: En combinación con el
carbonato de calcio se localiza en la matriz ósea en los animales
vertebrados
- Silicatos: Las gramíneas las
tienen como base o sostén, también forma en las diatomeas los caparazones.
Incluso mediante la impregnación de sílice (SiO2) se logra el
endurecimiento de las células vegetales de diversos organismos
fotosintéticos, como, por ejemplo, las gramíneas, y la formación de
la pared celular, que se formaría del mismo modo.
Sales disueltas
Las sales
disueltas son las que aparecen en el medio acuoso intracelular y
extracelulardentro de sus determinados iones, de ahí que también puedan
recibir el nombre de sales ionizadas.
Su
principal característica es la de ser capaces de disolverse en agua o,
dicho de otra manera, como su propio nombre indica, ser solubles.
Entre sus
funciones se encuentran:
- Sostener los niveles salinos
y la homeostasis (equilibrio
interno) de los organismos vivos.
- El control y regulación de
la presión osmótica y el volumen de la célula: la penetración y salida
del agua por la capa plasmática obedece a la concentración de sales en el
interior y exterior celular.
- Crear potencias de
electricidad:
Los iones externos e internos con su diferencia osmótica en el medio
celular generan un potencial de membrana que es sin duda clave para una
correcta realización de ciertos procesos, como la contracción del músculo
o la transmisión del impulso nervioso.
- Regular la acción enzimática: Al conectar con las
diferentes sustancias o con las enzimas que están presentes en ciertas
reacciones que tienen que ver con el metabolismo.
- Controla el pH: las disoluciones amitigadoras
(a modo de amortiguadoras) o tampón tienen el papel de sostener los
niveles de un pH continuo y normalizado en el medio interno del
organismo.
Las sales
minerales que son solubles en H2O o sales disueltas se
encuentran disociadas en su respectiva materia iónica, ya
sean aniones (Cl-, CO32-, HCO3-, NO3-, SO42-, PO43-…) o cationes (Na+,
K+, Zn+, Cu+, Ca2+, Mn2+, Mg2+, Fe2+, Co2).
Sales asociadas a moléculas
En este
grupo se hallan las fosfoproteínas y los fosfolípidos.
Los iones
de las sales minerales tienen la capacidad de unirse a moléculas, desempeñando
funciones que no podrían realizarse si el ion y la molécula actuaran
por separado.
De modo
que las sales minerales se asocian en resumen a las
moléculas orgánicas y también a las suborgánicas.
Comentarios
Publicar un comentario